lunes, 17 de marzo de 2014

21 días, un hábito

En el 100% de las consultas que tengo, siempre tenemos que modificar un comportamiento, y eso siempre lo hacemos intentando crear un hábito nuevo.... pero, ¿qué es un hábito?. El hábito es un comportamiento repetido regularmente, que incluimos en nuestro comportamiento diario. Existen diferentes tipos de hábitos: físicos, afectivos, sociales, mentales, de higiene, emocionales…

¿Qué necesitamos para formar un hábito?.  Lo principal es practicar en varias ocasiones eso que pretendemos conseguir, acostumbrando a nuestro cuerpo y nuestra mente, hasta llegar a conseguir hacerlo de forma automática, es decir, ya no es necesario pensar en qué es lo que vamos a hacer, o cómo debemos hacerlo, ya tenemos esta rutina establecida, hemos creado un hábito.

Según William James, filósofo y psicólogo Estadounidense “para crear o romper un hábito, uno tiene que realizarlo durante 21 días. Pasado ese tiempo, la acción repetida quedará interiorizada, funcionando de manera autómata”.

21 días es el plazo que varios investigadores han considerado necesario para crear un nuevo hábito.

Es de vital importancia que cuando nos planteemos crear un nuevo hábito, tengamos siempre presentes cuatro aspectos fundamentales: la motivación, la voluntad, la disciplina y el esfuerzo.

Pero, qué necesitamos para poder crear un hábito de manera correcta:

1- Es imprescindible valorar qué es lo que pretendemos conseguir, cuál es nuestro objetivo y qué acción debemos llevar a cabo para conseguirlo. Plantearlo de una manera clara y realista nos ayudará a ajustar nuestras expectativas. En muchos casos, un objetivo mal planteado y poco realista puede acabar frustrándonos e impulsarnos a desistir, creyendo que no somos capaces de lograrlo, cuando no es cierto.

2- En ocasiones, cuando el hábito que pretendemos conseguir nos resulta complicado, se recomienda, antes de empezar, realizar una lista de razones por las cuales conseguirlo es importante para nosotros, siendo objetivos con los beneficios que nos proporcionará, fomentando nuestra motivación hacia la consecución de dicho propósito.

3- Siempre que creemos un nuevo hábito, resulta recomendable elegir una fecha concreta, comprometiéndonos a comenzar a ejercitarlo ese día, evitando desde el mismo, el mayor número de circunstancias que puedan desviarnos de nuestro objetivo, al menos durante los primeros días, que resultan los más difíciles.

4- Es imprescindible buscar reforzadores que nos ayuden a seguir realizando ese acto. (Por ejemplo: si queremos coger el hábito de salir a correr todos las tardes, nos pondremos como refuerzo que, si salimos los 5 días seguidos a correr, tendremos derecho a un capricho que nosotros mismos elijamos. Debe ser algo que realmente nos guste y por lo que merezca la pena conseguir el objetivo). Buscaremos estímulos nuevos, beneficiosos y positivos para nosotros. Cualquier cambio, por mínimo que sea, debemos de reforzarlo, puesto que nos ha costado un gran esfuerzo llegar hasta donde hemos llegado, recordándonos a nosotros mismos que no merece la pena volver a empezar de nuevo. Debemos de ser positivos.

5- Es cierto que muchas personas fallan en sus primeros intentos de crear nuevos hábitos, pero esto no debe desanimarnos. Hay personas a las que, crear hábitos, les puede llegar a costar más tiempo o un mayor esfuerzo, pero esto no implica que no puedan hacerlo. En estos casos, más que en ningún otro, la búsqueda de reforzadores, la positividad, la motivación y la constancia son, sin duda, las claves del éxito.

¿creamos un hábito?

Si necesitas ayuda, ponte en contacto conmigo y hablemos sin ningún compromiso.

  carlos callejón
psicólogo y coach

No hay comentarios:

Publicar un comentario